Si hasta la semana pasada se vivía el desconcierto de no saber a qué se apunta, ahora Melgar sí lo sabe y lo sabe muy bien. El dominó lucha la permanencia en la categoría. Se metió nuevamente en un problema que parecía resuelto tras el triunfo que consiguió de visita (3-1) en Iquitos frente a CNI.
Ahora hay que preguntarse si fue o no beneficioso el receso último por Eliminatorias. Qué pasó en esas dos semanas de para, porque ese equipo que ganó con propiedad en el “Max Austin” y que pensó en Sudamericana, no es el que ayer terminó vagabundeando en la cancha de “Monumental” mientras Unión Comercio jugaba con la pelota como un “gato con una bola de lana”.
Desde el reinicio se han jugado cuatro partidos y solo se ha sumado un punto. Es más, en Arequipa Melgar no gana desde el 19 de agosto cuando metió 3-0 a Vallejo. Luego empató con Aurich 1-1, perdió con San Martín 0-1, igualó 2-2 con León de Huánuco y cayó 1-2 con Unión Comercio. Así se ha movido la dominó en quizá una de sus peores campañas de la última década y eso que ha tenido temporadas para borrar de la memoria.
Valencia el culpable. Quizá su fórmula de frontalidad y exigencia con sus jugadores cansó al grupo. O derrepente este ramillete de futbolistas simplemente llegaron a un techo y están en franca caída.
Para “prenderle velas”
La noche del viernes, la Comisión de Justicia de la Federación Peruana de Fútbol ratificó la sanción que dio la CJ de la Asociación Deportiva de Fútbol Profesional y le otorgó 3 puntos a Melgar por el partido suspendido con Universitario de Deportes.
Esos 3 puntos ahora se valoran como “caídos del cielo”. Sino los tendría, estaría a un punto del penúltimo del campeonato: Sullana (27) y a cuatro del último: CNI (24). Pero con 31 puede valerse por sus propios medios para salvarse del descenso. No depende de nadie en esta lucha por mantenerse en la profesional.
Luego de este nuevo receso por Eliminatorias, jugará en el Callao con un Boys esperanzado en llegar a la Sudamericana. Después recibirá a un Alianza Lima que seguro mandará a un equipo alterno priorizando afrontar los “play off” del campeonato nacional. Finalmente irá a Piura para medirse con Alianza Sullana que en ese partido, supuestamente, definirá su permanencia en primeras.
Si Melgar cree que se salvará de esta con la “ayuda” de la Divina Providencia se equivoca. Esta vez ni su errada dirigencia, ni su comando técnico del explosivo Valencia tienen la solución en las manos. La responsabilidad recae únicamente en los jugadores que son los que se metieron en este embrollo.
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