Bajo qué condiciones Idunsa accedió al requerimiento del Carlos A. Mannucci de Trujillo para cederle la posibilidad de jugar en la Segunda División Promocional, nadie lo sabe. Es un secreto que el rector de la U. San Agustín, Valdemar Medina Hoyos, guarda bajo siete llaves.
Lo concreto es que la “alianza estratégica” entre ambas instituciones comenzó andar. Ayer el delegado agustino en Lima, Hugo Rueda, se reunió con Medina para que le entregue una carta dirigida a la Segunda División pidiendo el cambio de localía a Trujillo. Esa propuesta, para que se haga realidad, necesita la aprobación de 10 de los 12 clubes que juegan este torneo.
“Lo que queda claro es que no ha habido ninguna venta de categoría”, ratifica Rueda. “Las cosas no son tan fáciles como muchos piensan. Primero los delegados tienen que aprobar el cambio de localía”.
Aclaró que Idunsa no cambiará de denominación a Mannucci, por lo que podría haber una fusión de nombres. “Con el tiempo y luego de muchos trámites se podrá cambiar de nombre, pero por ahora no”. Sobre los jugadores se informó que la intención es que los que tienen vínculo contratual con el equipo puedan tomar la decisión de emigrar a otros clubes.
Lamentó que por la indiferencia de la empresa arequipeña el club se haya visto obligado a negociar la categoría. “No hemos recibido el apoyo de nadie de Arequipa. Es lamentable que el presidente del club (Valdemar Medina) se haya visto obligado a tomar tal decisión; pero ya no hay marcha atrás”.
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