Edgar Romaní respira tranquilo. Quedó de lado el engorroso problema de su inscripción en Sportivo Huracán y solo espera el sábado para jugar e iniciar con buen pie la participación en la etapa Regional.
“Hay tranquilidad porque ya se solucionó el problema y confianza porque se ha trabajado bien para hacer una buena Regional”, comentó a LÍBERO.
Campeón de Copa Perú con Bolito de Tacna en el 2001 y Atlético Universidad en el 2002; además de alzar el título de la Segunda División con Total Clean en el 2006, sabe que para “campeonar” es un pecado “sentirse más que los demás”.
“En este tipo de campeonatos hay que ver todos los partidos como finales. Para nosotros el partido del sábado ante Episa es una final y saldremos a ganarla sin descuidarnos”.
“Estamos en una institución grande, histórica y que quiere llegar al fútbol profesional. Existe una responsabilidad que parte del deseo de hacer bien las cosas”, siguió.
“Acá los jugadores están identificados con el equipo y eso lo han notado todos”, finalizó.
Comentarios