Zúñiga no da su brazo a torcer mientras que Techera guarda calma

Parece infranqueable en su decisión. “Para mí esto no es broma”, aclara Ysrael Zúñiga tras cumplir su palabra de no entrenar más mientras Claudio Techera continúe como técnico de Melgar. Miró toda la práctica desde un banco al costado de la cancha del estadio La Tomilla de Cayma. “Yo ya tomé una decisión y esta es pedir a la directiva que me presten”, confiesa.
Hasta ayer en la mañana su solución salomónica tenía dos posibilidades. “Que me presten o me permitan rescindir contrato”, propone. “Una vez soporté el maltrato, dos veces ya no. La decisión la tienen ahora los dirigentes”.
Y volvió a ratificar que a estas alturas de su carrera profesional hay que asegurar su futuro económico. “Uno tiene que ver su mejora económica”, asegura. “La decisión ya está tomada, por mi parte no hay paso atrás. La decisión queda en manos de la directiva. ¿Universitario o Alianza?.... no hay nada al respecto”.
Hoy sábado se conocerá esta decisión. Ayer por la noche, fue citado por su presidente Anibal Calle al local del club para – supuestamente – conciliar.

EVITA POLÉMICA
Ayer fue un día tenso. Mientras Zúñiga espectaba la práctica sólido en su decisión, Techera trataba de maquillar la crisis interna del equipo dirigiendo la práctica sin inmutarse.
“Zúñiga no va a jugar porque tiene descanso médico”, señalo el uruguayo. “Pese a todos estos problemas sé que mañana le ganamos al Aurich. Este es un grupo impresionante y sé que como lo ha hecho antes va a superar los obstáculos”.
Retomando el caso Zúñiga dijo que lo considera entre los “tres mejores delanteros del medio” y que cuando estuvo dispuesto a jugar “siempre salió en el equipo”. “La dirigencia es la que contrata a los jugadores y técnico, ellos tendrán que decidir. Yo sólo les digo que este grupo ha conseguido los objetivos que se ha propuesto y si ganamos estos dos partidos que nos quedan podemos decir que seremos un equipo campeonable”.
“Yo soy quien soy”, prosigue. “Cada uno es dueño de sus palabras”, dijo refiriéndose a Ysrael. “La dirigencia está en potestad de decidir lo que mejor le parezca”, finalizó.

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