Flores en una semana vivió todos los rostros de su Melgar. De la goleada a Cienciano, pasó a perder con San Martín en Arequipa y ayer cayó goleado en Sullana ante el Alianza Atlético. ¿Cuál será su análisis?. Mucho tiene que pensar, pero todo se lo guarda para sus adentros. Así es "Puchito" que quizá vive su momento más difícil en todos sus años como entrenador recuerrente de la dominó. Y es que parece que la varita mágica que lo convirtió en el "apaga incendios" ahora parece haberse esfumado. No es mago y como todos falla, pero ahora se siente una impaciencia por los resultados de su trabajo que se ven reflejados en 8 partidos dirigidos y sólo dos triunfos. Muy poco para alguien que llegó como salvador de un grupo que se resquebrajaba y era, sigue siendo, mejor dicho; desunido, intolerante y voluble.
Ya ni el correr y las ganas de Zúñiga o las atajadas de Rodríguez pueden cambiar la cara a un Melgar que sólo espera que termine el campeonato para darse un respiro y quizá comenzar una nueva historia con los mismos errores de todos los años. No hay nada que haga avisorar que el 2010 será mejor, al menos por parte de la dirigencia es muy pobre lo que trata de irradiar a sus hinchas.
El 1-4 de ayer en Sullana prácticamente sentenció lo que será una constante en estas últimas fechas. Flores plantó un equipo experimentado con Ferrari e Hidalgo pero no funcionó. No se ganó orden, ni manejo de balón. Se perdió, en contraparte, fútbol ante un equipo como el Sullana que trato de hacer pesar su localía y no fue más que las ganas que puso la "Foca" Farfán.
Habría que preguntar a cada uno de los cerca de 30 jugadores qué aspiran o pretenden en lo que resta del campeonato. Derrepente en un acto inusual de sinceridad, aunque eso es tan improbable como la clasificación a la Sudamericana, muchos explayen su sentir crudo y real. Derrepente "Puchito" se de cuenta que esta última recta del campeonato la tiene que afrontar con los arequipeños, esos que están acostumbrados siempre a terminar los campeonatos y dar cara, esos quizá sean los idóneos para cerrar el año.
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