Indecopi (Instituto Nacional de Defensa de la Competencia
y de la Propiedad Intelectual) y Carrizales & Vidal Abogados,
administradores temporales del FBC Melgar, vienen evaluando un grupo de
expedientes de personas jurídicas y naturales que se presentaron como
demandantes crediticios para conformar la Junta de Acreedores que será, la que
a final de cuentas, definirá el futuro del club rojinegro.
De las conocidas deudas contraídas con la Sunat, las
AFP´s y ex trabajadores, existe un expediente que presentó el ex presidente de
Melgar, Alejandro Corrales Zea, con una cantidad que sobrepasa los 400 mil
nuevos soles; exactamente son 485 mil 654.74 nuevos soles.
Al respecto, se consultó a Robert Gutiérrez, quien
sustituyó a Corrales en la presidencia en el 2005. “Solo por comentarios se
decía que le debía 80 mil dólares; pero nunca presentó un documento ni nada. Es
más, se le devolvió los 15 mil dólares que prestó para pagar los sueldos a jugadores
de noviembre y diciembre del 2004. En enero del 2005 con dinero de telefónica
se le canceló la deuda”, comentó a LÍBERO.
Esta acreencia aún Indecopi no la ha aprobado y sigue en
evaluación.
Lo que se tendrá
que pagar
Indecopi ha reconocido las deudas que tendrá que pagar la
nueva administración temporal del FBC Melgar. La principal es con la
Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat) que
asciende a 3 millones 697 mil 571.5 nuevos soles.
Luego, en orden cuantitativo, sigue la que se tiene con
cuatro AFP (Administradora Privada de Fondos de Pensiones): Integra (461
mil 821. 07 nuevos soles), Prima (157 mil 626.91 nuevos soles), Pro Futuro (178
mil 624.32 nuevos soles) y Horizonte (20 mil 943.69 nuevos soles).
A Alejandro Tapia, ex administrador, se le ha reconocido
un pago de 185 mil 943.63 nuevos soles y a la ex secretaria, Violeta Lima, 6 mil 653.80 nuevos
soles.
Queda claro que estas sumas al momento de ser
refinanciadas, según el plan de pago que presente Carrizales & Vidal
Abogados, sufrirán un incremento producto de intereses, costos y costas
procesales, tomando en cuenta que ambos, antes que Melgar ingrese al proceso
concursal, ganaron en última instancia sus juicios laborales.
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