Algo pasó en el camino y en este proceso, porque ojo esto se ha vendido como un proceso o, mejor dicho, la continuidad de un trabajo que solo cambió de cabeza porque en sí el cuerpo es el mismo. Marcelo Straccia fue el "poder tras el poder" de Zamora, eso lo saben todos los que estuvieron alrededor del equipo rojinegro. Solo hubo un quiebre. El "Negro" no siguió, se fue entre lamentos y varias aristas que aún quedan por descubrir; pero el "cerebro" se quedó. Tomó el sartén por el mango y aplicó en primera persona todo lo que antes aconsejaba al oído.
Ni el poner cuatro delanteros en cancha funciona. A Zamora eso le salía a la perfección, fue su sello de irreverencia y arrogancia cuando jugaba de local; pero a Straccia no le da resultados y eso que sus variantes solo en el papel parecen más ricas.
Los jugadores son los mismos. Una ausencia que a estas alturas se extraña: Di Cosmo. Una cara nueva que ya se quiere olvidar: Bezruk. Un solo hombre puede marcar tanta la diferencia o la cosa va a un análisis mayor. El equipo se para igual, no hay variantes en es sentido.
Marcelo debe estar pensando en qué ha fallado. Analiza su cuaderno de alineaciones y simplemente no lo entiende. Mismos hombres, mismo sistema y nada. El equipo en dos fechas del Descentralizado no funciona y hasta a él le queda claro.Begazo no fue culpable de los dos tantos de Reyna. Ni con Carvallo y Butrón juntos podrían detener esos furibundos disparos que callaron a la Sur. El camanejo no esperaba que Yordi se saque con tanta facilidad a Contreras en el mano a mano del primer tanto o que reciba en cámara lenta un pase que lo dejó solo para fusilarlo en el segundo. Ni él ni la gente que fue al estadio lo entiende.
Tampoco que Salas pierda tantas pelotas en salida, ni que le anulen un tanto que le hubiera significado llegar a los cincuenta goles como profesional. Y nadie entiende como Aubert puede pasar tan inadvertido, como si le quitaron protagonismo a un hombre que a estas alturas no debe tener problemas en ponerse el equipo al hombro.
La cosa no pintaba bien desde el principio. El partido casi se suspende a los 28´del primer tiempo cuando el juez Freddy Arellanos paró el partido porque la popular comenzó a insultar a Luis Trujillo que se aprestaba a cobrar un tiro de esquina. Esos gritos burlones y racistas casi cuestan un castigo para el club y el estadio
Alianza no tuvo mayor virtud que la paciencia para esperar el momento adecuado de dar sus estocadas. Y eso se notó en el inicio de la parte final. Ya se habían dado cuenta que con Cuesta controlado, el ataque rojinegro era inexistente. El argentino tuvo dos disparos de gol, uno en cada tiempo y ambos bien barajados por el portero Heredia.
Quinteros, Bazán y Albarracín comenzaron a hacer el fútbol que escaseaba en la volante de Melgar. Tuvieron amplia libertad para crear, más aún cuando el técnico dominó decidió desarmar su mediocampo. Sacó a Yáñez y comenzó a flaquear la marca porque Ojeda no se abastecía para moverse de un lado a otro. Pero la cosa empeoró cuando dejó la cancha. Se le regaló el partido a Alianza.
La orden del banco de suplentes "grone" era clara. Den la pelota a Reyna que el luego resuelve y así fue. Dos ocasiones claras y dos goles sellaron la victoria de Alianza.
Ya al final, ese equipo duro y agresivo como se autodenomina Melgar trató de justificar esa fama con un conato de bronca que se inició con un insulto, pasó por empujones y manotazos; y terminó en un abrazo entre Valencia y Straccia.
Así terminó la tarde para un equipo que es igual pero muy diferente al del año pasado.
ALINEACIONES
MELGAR: BEGAZO, BEZRUK TA, BALTA, CONTRERAS TA, GARCÍA, YÁÑEZ TA, SALAS, OJEDA, AUBERT, CUESTA Y MEZA CUADRA. CAMBIOS: FRONTÁN POR AUBERT, MORALES X YÁÑEZ, ZÚÑIGA X OJEDA.
ALIANZA LIMA: HEREDIA, CUBA, APARICIO, VILLAMARÍN, BELTRÁN TA, TRUJILLO, ALBARRACÍN, QUINTEROS, BAZÁN, REYNA Y MOSTTO. CAMBIOS: URIBE X QUINTEROS, CUETO X BAZÁN, AGUIRRE X MOSTTO.
ARBITRO: FREDDY ARELLANOS.
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