“Más vale prevenir”,
reflexiona Helard Delgado, técnico de Sportivo Cariocos. Es por eso que ayer
ratificó sus denuncias contra Fuerza Minera y el clima hostil que están
generando para el partido del domingo en Juliaca.
“Ponemos en alerta de lo
que podría pasar”, dijo tras la práctica en al GUE Mariano Melgar. “Quieren que
el equipo llegue con temor o que tomemos una decisión equivocada”.
“Esto es fútbol y hay que
tomarlo como tal. Pero lo toman como guerra, desde la primera declaración de su
presidente que dice acá vamos a golear, se le nota muy seguro por lo que están
manejando por fuera”, puntualizó.
En la reunión previa al
inicio de la práctica habló con sus jugadores y les pidió que si reciben
llamadas “malintencionadas” las “graben para luego denunciarlos”.
El mollendino también
habló de la intención de los altiplánicos de presentar reclamos contra dos
jugadores y reavivar el tema de Davidson Cordero. “Es parte de una guerra
sucia. Lo de Cordero es una cosa juzgada, ahora dicen que hay jugadores mal inscritos
y quieren desestabilizar. Se está haciendo una revisión minuciosa de
documentos, si hay una duda no se va a colocar a ese jugador”.
Del clima tenso que se
está creando en Juliaca, indicó que ya la directiva ha puesto cartas en el
asunto y está coordinando con la Policía
Nacional para enviar un contingente de Puno para cuidar la integridad del
plantel.
“Los jugadores no pueden
ir con temor. Siendo más conchudos y más sueltos los vamos a desesperar”.
HA trabajado en Puno y
sabe que la gente presiona mucho al rival pero aún más a los jugadores locales:
“Si soportamos el primer tiempo y en el complemento ellos juegan contra el
tiempo y contra la tribuna. La gente es muy dura con sus jugadores. Sé cómo es
ese ambiente”.
Sobre la dura llamada de
atención a sus jugadores en la práctica del jueves señaló: “A veces hay que
hablarles fuerte y tirarles una guapeada para que reaccionen”.
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