El consorcio Juan Pablo II
encargado de los trabajos de mejoramiento del coliseo Arequipa ha dado una
nueva fecha para el reestreno de uno de los escenarios más importantes de la
ciudad. Han propuesto hacerlo dentro de 25 a 30 días, es decir la primera
quincena de febrero.
Esta obra que debió ser
entregada a fines del 2014 ha sufrido una serie de paralizaciones, la última
terminó este miércoles, debido a los diversos problemas de comunicación que
surgieron entre la contratista, la municipalidad provincial y el Instituto
Peruano del Deporte, dueño del recinto.
La última detención de los
trabajos se produjo porque la contratista quiso instalar un piso de básquet que
se adecue a las exigencias técnicas de la FIBA (Federación Internacional de
Básquet) y pueda ser homologado para albergar competencias internacionales.
Para hacerlo tenía que
modificar las dimensiones de la cancha lo que obligaba a derrumbar una grada de
butacas. El IPD negó esa modificatoria en el expediente técnico y solicitó
tácitamente que cuando antes entreguen una obra que debió concluirse hace 15 meses.
Ayer se llevó adelante una
nueva inspección oficial, encabezada por Lilian Pauca (regidora de la comuna
provincial), donde se verificó la reanudación de los trabajos de instalación de
un piso de poliuterano que servirá para la práctica del básquet, vóley y fútsal
solo a nivel local más no internacional que era el principal objetivo que
propuso la Municipalidad Provincial cuando se firmó el convenio con el IPD.
Mientras los
representantes del Consorcio, ingenieros Rolando Manrique y Luis Carpio (ingeniero residente), salvaban
responsabilidades sobre el retraso en el trabajo; el ingeniero Dan Galicia,
gerente de desarrollo urbano de la comuna, tiraba todo el saco de
responsabilidad al IPD por truncar las últimas modificaciones que prácticamente
privan a este escenario de ser sede de eventos internacionales.
Por su parte el IPD Nacional
se ha mantenido en mutis debido a que al no cumplir con su parte del convenio
(debió entregar 800 mil nuevos soles) se siente incapacitado de reclamar
públicamente pero sí lo ha hecho directamente a la comuna provincial a la que
está invocando a que le devuelva este escenario.
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