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| Sensible abrazo con Suárez. Atrás, el incondicional Vivanco. |
"Todos estamos muy emocionados. Lo buenos años que he vivido en Arequipa hacen que la despedida sea muy dura. Primero agradecer a la gente del club a Jader a José, espero no olvidar nombres: Nicole, Víctor Hugo, Juliana, al comandante, Francisco, Marco, Carlos, a la gente de la cocina que hoy alimenta a los muchachos, a Héctor al contador, Javier, Jhon, Hernán, en verdad es una familia. Yo llegué con muchas dudas, con una ilusión enorme, la verdad uno hace un recuento de estos últimos años y me voy con el ego al tope porque veo muchachos que llegaron a la reserva y hoy son una realidad. Veo a un club con un futuro y una proyección enorme, todo en orden y si bien soy la cara visible en estos momentos, toda la gente que acabo de mencionar siempre me respaldó. Agradecerle a todo el pueblo arequipeño la hospitalidad, me sentí respetado, querido. El día con día yendo a los entrenamientos, al súper o al cine, la verdad es algo que no lo viví y no soy de pasarle la mano a nadie, no lo he vivido ni en Lima. Acá me sentí respetado, siempre un profesor, Juan, nunca un apodo y esto se lo voy a contar a mis hijos y nietos. Es un hasta luego, regresaré Dios quiera en un momento para seguir apoyando (se quiebra)... Increíble sobremanera, así como nos han apoyado (los hinchas) hoy, nos han apoyado en momentos delicados del club, en situaciones límites. Sigan apoyando a los muchachos. Hoy todos tristes porque no pudimos regalarnos una victoria en nuestro último partido de este año porque seguro que en un futuro habrán partidos donde estemos juntos. Pero sí apenado por esta situación. Reiterarles mi agradecimiento para toda la gente que se ha quedado para escuchar estas palabras, marcar una despedida como corresponde. Hubiéramos querido manejar las cosas de una forma distinta, pero hoy las redes sociales, los medios hacen que todo trascendiera, pero me los llevo en el corazón y ojalá que no me olviden (llora)", con ese improvisado discurso Juan Reynoso se despidió de Melgar.
El resultado (2-2 ante Rosario) pasó a un segundo plano y fue tomado de irrelevante, pese a que condena a Melgar a seguir mirando de lejos el título del Clausura. Los más de 400 hinchas, que después del encuentro ocuparon la tribuna de occidente central del estadio Melgar, solo querían escuchar las últimas palabras de Juan Reynoso, el técnico que llegó en el 2014 y que talló su nombre en la historia de club con un título nacional, un subcampeonato nacional y tres clasificaciones seguidas a la Copa Libertadores.
El técnico limeño se va al Puebla de México como asistente técnico. Tal como lo explicó un día antes a sus jugadores, se decidió por desembarcar de Melgar por motivos familiares.
Fue José Suárez Zanabria, administrador del club, el que, cargado de emoción, le dio las palabras de despedida en un improvisada conferencia de prensa.
"Reynoso no se va, Reynoso no se va", "Reynoso, Reynoso, Reynoso" y "Reynoso amigo Melgar está contigo", fueron las frases de agradecimiento que los hinchas dedicaron a un hombre que supo, con resultados, ganar respeto y simpatía.No fue una conferencia de prensa como se pensaba. Fue un monólogo para cumplir con su promesa personal de no declarar a los medios arequipeños. Así se fue el técnico más exitoso en los 112 años de existencia de Melgar, pero como lo ha anunciado: volverá en algún momento.
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