Ernesto Neyra, el goleador aún inalcanzable de Melgar

Ernesto Neyra, celebra el tanto que le anotó a Sol de América de Paraguay. En esa Libertadores 1982 le convirtió 3.


Neyra Llamosas es un apellido anclado en la historia de Melgar. Los hermanos Neyra, los Chivos, Genaro, Ernesto y Arturo son marca registrada del club, así como lo son los Márquez Obando: Eduardo, Carlos y Óscar.
Don Arturo, fallecido en el 2016, jugó por la Dominó en la Copa Perú de los finales de la década de los 60`del siglo pasado, mientras que Genaro y Ernesto fueron claves en el primer título profesional de 1981. Si bien Genaro es el segundo goleador histórico del club (123 tantos), Ernesto tiene una marca igual de importante, es el máximo goleador de Melgar en Copa Libertadores con 5 tantos, todos conseguidos en la edición de 1982.
Ernesto no tuvo una estadía prolongada en Melgar, jugó las temporadas 81, 82 y 85; donde anotó 39 tantos de los 157 goles que se le registra: Ugarte de Puno 90, Universitario 21, CNI 5 y Octavio Espinoza 2.
En Libertadores no solo convirtió con la rojinegra. El 7 de marzo de 1976 anotó con la camiseta de Ugarte en el 2-2 de su visita al Santa Fe de Colombia; y el 24 de febrero de 1979 lo hizo con Universitario en la victoria por 6-3 frente a Alianza Lima.
Su primer club fue el Association de su barrio, la calle 28 de Julio de Camaná. Luego viajó a Arequipa para estudiar en el Colegio Militar Francisco Bolognesi, pasó por Atlético Universidad y Carsa con el que juega la finalísima de la Copa Perú de 1972.
A Municipal le anotó también un doblete.


“Luego de jugar la finalísima de 1972 me contactan para ir a Juliaca a jugar por el Volante. Me aventuré y viajé a Juliaca, recuerdo que agarré una movilidad y el que conducía era Don José Aguayo, padre de Aguayo con el que años después jugué en Melgar. Cuando llegué me fui a almorzar y se me acercó un señor de apellido Palomino, me preguntó si quería jugar en Ugarte. Me convenció y fui a Puno, en Ugarte jugué desde 1972 hasta 1978”, cuenta.
El 79`y 80`estuvo en Universitario de Deportes; luego vino a Melgar para campeonar en 1981 y se quedó el 82. Se enrola en el CNI de Iquitos (1983), pega la vuelta a Ugarte (1984), en 1985 retorna a Melgar y en 1986 viste la camiseta del Octavio Espinoza de Ica donde se retira en 1986.
“Debí llegar antes a Melgar. Siempre me gustó ese club porque una vez fueron a Camaná, en 1967, para un amistoso y vi a Patato (Eduardo Márquez), Palacios, Ponce Arroé, etc. Quedé impresionado. Yo quería ir a Melgar, pero tenían unos tremendos jugadores y decidí probar suerte en Ugarte. Luego ya maduro me fichan en 1981. Con Patato, a quien admiraba, jugamos juntos en los torneos máster”.

En Melgar es recordado por sus goles en la Libertadores de 1982. Anotó un doblete en el debut triunfal frente a Municipal (2-1). También le convirtió a Sol de América de Paraguay en Arequipa y en Asunción. No pudo vulnerar la valla de Olimpia.
“En Arequipa en el primer tiempo a Olimpia le debimos meter tres, pero fallamos mucho. En el complemento ya desesperados nos ganan de contragolpe”, ese partido terminó 0-3 en contra. ¿Qué pasó en la vuelta? “Cuando jugamos con Sol de América en Paraguay le anoté un doblete, pero me expulsaron no sé por qué y me sacan del partido de revancha con Olimpia. Ojo, ese Olimpia tenía la base del equipo que en 1979 había ganado la Copa Intercontinental”.
Es hincha de Universitario, pero quiere mucho a Melgar. Fue llamado a la selección en los procesos para los mundiales de 1978 y 1982. El recuerdo que más añora con la blanquirroja es la vez que enfrentó en 1979 al Argentino Juniors donde ya era figura Diego Armando Maradona.

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