En Brasil no hubo sorpresa, Palmeiras 3-0 Melgar

Goulart ya metió el frentazo. Cáceda no puede hacer nada mientras Sánchez, Fuentes y Narváez aparecen en escena. Derrota sin atenuantes en Brasil. 
No hubo sorpresa en el Allianz Parque de Sao Paulo. Palmeiras no tuvo problemas en superar a un limitado Melgar y dio trámite sin complicaciones a una victoria que lo coloca en la punta del grupo F de la Copa Libertadores de América.
Tampoco a los rojinegros les llama la atención el resultado. Ya desde los 10 minutos de juego se preveía un desenlace como  el que se tuvo. Melgar se enfrentó a uno de los equipos más fuertes del mundo (5to. en el ranking mundial de clubes) y aunque en la previa se animaba pensando en que en el fútbol no hay lógica, al final solo se resignó a aceptar su realidad.
El 3-0 no da cabida a discusiones. Solo hubo un equipo en la cancha y otro que intentaba ser un digno rival, pero sin armas colectivas ni individuales. Ahí se refleja la diferencia económica abismal que existe entre dos planteles, uno siendo de los más modestos de la Libertadores y el otro con el equipo más caro de Sudamérica.
Partidos como el de esta tarde solo dejan enseñanzas, hay como tomarlos como una lección. Ya San Lorenzo de Argentina en la primera fecha de la Fase de Grupos dio un aviso de lo que será esta etapa que es muy diferente a las dos previas que tuvo que pasar el dominó.
El colero del fútbol argentino, un equipo que no gana desde octubre de 2018, que vive una crisis interna, llegó a Arequipa y le paró el macho a un Melgar que debe ser uno de los tres mejores exponentes futbolísticos del balompié peruano. Ahí está bien marcada la diferencia entre un club de una potencia futbolística y otro de un país de tercera línea en competencias internacionales.
Era poco lo que se podía esperar del partido ante Palmeiras. Las mismas casa de apuestas pagaban cifras inusuales que iban a 16 a 20 veces más de la cuota si Melgar ganaba y de 7 a 9 veces más sin empata. Era solo para endulzar a los hinchas que esperaban un milagro de esos que solo se dan en el fútbol.
A penas el juez paraguayo Mario Díaz dio el pitazo inicial comenzó el sufrimiento en Arequipa. Melgar metido atrás, con 10 hombres en su territorio, con una línea de 5 defensas que por primera vez experimentó Pautasso y un arquero inmenso como Cáceda que sacó todas sus credenciales de portero de selección.
Fue un monólogo. Cuando Palmeiras se animó atacó y causó pánico. Cáceda se convirtió en la figura del equipo, sacó todo lo que pudo, más no se le puede exigir. La defensa sufría en cada incursión de Dudú, Scarpa, Deyverson o Goluart.
Solo fue cuestión de tiempo para que llegue el primer tanto local. Fue Felipe Melo, el recio volante que pasó su fútbol por clubes como Juventus o el Inter de Milán, puso el primero de cabeza a los 24´. 
Se rompió el cero y Palmeiras comenzó a manejar el partido a su antojo, sabía que al frente tenía a un rival sin posibilidades de hacerle daño.
En el segundo tiempo salió a definir el partido. Los goles de Ricardo Goulart (53´) y Deyverson (70´) hicieron justicia al marcador.
Ni en las matemáticas más optimistas de Pautasso estaba el sumar en Brasil. Era, y se comprobó en carne viva, una tarea difícil por no decir imposible. Lo que está claro es que Palmeiras se llevará caminando el primer puesto del grupo. El segundo cupo lo disputarán San Lorenzo y Junior, que mañana juegan en Argentina; y en esa lucha puede meterse Melgar siempre y cuando mejore mucho.
Pero ojo un tercer puesto tampoco cae mal. El Art. 22 inciso h) del Reglamento de la Libertadores estipula que los terceros de cada uno de los ocho grupos clasificarán a la segunda fase de la Sudamericana. 

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