Aún muchos se preguntan por qué Andy Polar renunció a la posibilidad de jugar por Melgar, excusándose en un problema familiar para dejar la concentración y no regresar ni para despedirse de sus compañeros. Bueno, la explicación es simple. El volante arequipeño de 18 años se sintió engañado.
¿Cómo así? el jefe de equipo, Gustavo Vivanco, contactó a Andy y tras convencerlo de que se una al equipo dominó le prometió un contrato de un año y un aproximado de 3 mil dólares mensuales de sueldo. Pactaron de caballeros, pero el día que se unió a la concentración (10 de enero), le comunicaron que firmaría por tres años y que su sueldo se reduciría a la tercera parte.
Lógicamente se sintió burlado y decidió largarse. Lamentablemente dentro de su inexperiencia no optó por ser frontal y decidió buscar una excusa para abandonar el hotel El Lago. La otra parte de la historia ya es conocida por todos.
Bueno, Polar no lo hizo porque Cienciano le hizo una propuesta como argumentó Melgar; es más la "joyita" seguirá jugando en Binacional este 2017.
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