A
veces se siente solo en esta lucha por cambiar el
sistema. En Melgar ha sentido el peso de esa maquinaria que tiene al balompié
nacional en el hoyo.
”Estoy hablando sobre el macro, no
hablo si va a campeonar Melgar u otro equipo, hablo de que nos debe mover el
bien del fútbol peruano”, aclara.
La falta de justicia, de honestidad
y de equidad, son comúnes en un torneo que se resiste al cambios de
protagonistas.
“Me da tristeza que como con equipos
A, B C y D se dimensionan las cosas de una forma y con otros equipos se hacen
los distraídos, pero bueno... ¡Viva el negocio!”.
“Condicionan al entorno, al
arbitraje. Y me da tristeza porque esa
actitud no se paga en el torneo local sino cuando se juega a nivel
internacional a donde no llegan los mejores”.
Respecto al tramo final del Apertura
aclaró que Melgar “depende de si mismo” porque ganando los seis puntos en
disputa se “puede campeonar”.
“Prometimos luchar los primeros puestos y lo cumplimos en
el Inca y Apertura, y seguro que en Clausura también lo haremos”, finalizó.
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