Su visita al “Campeones del 36” acabó con saldo a favor (empate) cuando bien pudo regresarse sin nada en la mano. Melgar no fue “otro” del que ya conocemos cuando juega de visita. Jugó a lo mismo sin llegar todavía a asomarse a ese equipo que en su debut en Cusco ante Cienciano creo hasta ahora falsas expectativas. Alianza Sullana sin ser ni más ni menos se convirtió en el rival ideal para ratificar nuevamente que a Techera y compañía están futbolísticamente muy lejos de lo que ellos mismos esperan de sí.
En la semana Techera dijo que a “estas alturas” jugar bien pasa a un segundo plano cuando los resultados se hacen obligatorios. Eso explica la actitud de un grupo que sabe que puede dar más pero que aún no encuentra la manera de hacerlo.
Ayer ante Alianza Sullana, el mal estado del campo o el calor, Melgar consiguió un punto nuevamente gracias a lo que pueden hacer sus individualidades que por el juego en conjunto que pueda producir. Otra vez, Rodríguez, pese al tanto de Roberto Farfán, fue una muralla y hasta tuvo la complicidad del travesaño para mantener su arco con un solo gol en contra.
El empate conseguido en el cierre de la primera etapa por Ricardo Pérez que el miércoles en Congata reclamó en susurros porqué no gozaba de una oportunidad de Techera, llegó quizá en la única jugada elaborada de los rojinegros. Fue pelota parada, un tiro libre de Aubert (ya lleva dos asistencias de gol bajo el mismo método) y la testa de “Ricky” le dio dirección de arco al balón.
El gol anulado a Zúñiga, cuando el partido comenzaba a agarrar calor, más que una anécdota ratifica que los árbitros directa o indirectamente siempre estarán ahí, definiendo el destino de los rojinegros. Pero sus fallos buenos o malos no pueden ocultar que este equipo no encuentra una brújula de juego, un patrón a seguir, y al que le falta personalidad pese a los años que reúne de experiencia. Se acomoda muy fácil al rival porque si ayer Sullana hubiera acelerado un poco más, no hubiera pasado por encima a Melgar sino que lo hubiera obligado a jugar mejor y terminar de ese letargo de hacer lo mínimo para sacar un resultado.
Un punto a estas alturas poco sirve. De 27 en disputa han conseguido 11. Esos son los números de los que antes, en diciembre, hacían sacar pecho a Techera y que ahora trata de hacerlo pasar a un segundo plano.
Así jugó Melgar: Jorge Rodríguez; Jhon Fajardo, Rivelino Carassa, Javier Pereyra, Marlón García, Walter Zevallos, Jean Ferrari, Larry Yáñez, Edson Aubert, Ricardo Pérez y Ysrael Zúñiga.
Amarillas: Ferrari, Zevallos.
Arbitro: Héctor Pacheco.
En la semana Techera dijo que a “estas alturas” jugar bien pasa a un segundo plano cuando los resultados se hacen obligatorios. Eso explica la actitud de un grupo que sabe que puede dar más pero que aún no encuentra la manera de hacerlo.
Ayer ante Alianza Sullana, el mal estado del campo o el calor, Melgar consiguió un punto nuevamente gracias a lo que pueden hacer sus individualidades que por el juego en conjunto que pueda producir. Otra vez, Rodríguez, pese al tanto de Roberto Farfán, fue una muralla y hasta tuvo la complicidad del travesaño para mantener su arco con un solo gol en contra.
El empate conseguido en el cierre de la primera etapa por Ricardo Pérez que el miércoles en Congata reclamó en susurros porqué no gozaba de una oportunidad de Techera, llegó quizá en la única jugada elaborada de los rojinegros. Fue pelota parada, un tiro libre de Aubert (ya lleva dos asistencias de gol bajo el mismo método) y la testa de “Ricky” le dio dirección de arco al balón.
El gol anulado a Zúñiga, cuando el partido comenzaba a agarrar calor, más que una anécdota ratifica que los árbitros directa o indirectamente siempre estarán ahí, definiendo el destino de los rojinegros. Pero sus fallos buenos o malos no pueden ocultar que este equipo no encuentra una brújula de juego, un patrón a seguir, y al que le falta personalidad pese a los años que reúne de experiencia. Se acomoda muy fácil al rival porque si ayer Sullana hubiera acelerado un poco más, no hubiera pasado por encima a Melgar sino que lo hubiera obligado a jugar mejor y terminar de ese letargo de hacer lo mínimo para sacar un resultado.
Un punto a estas alturas poco sirve. De 27 en disputa han conseguido 11. Esos son los números de los que antes, en diciembre, hacían sacar pecho a Techera y que ahora trata de hacerlo pasar a un segundo plano.
Así jugó Melgar: Jorge Rodríguez; Jhon Fajardo, Rivelino Carassa, Javier Pereyra, Marlón García, Walter Zevallos, Jean Ferrari, Larry Yáñez, Edson Aubert, Ricardo Pérez y Ysrael Zúñiga.
Amarillas: Ferrari, Zevallos.
Arbitro: Héctor Pacheco.
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