Ser
capitán de una selección nacional no es común en un provinciano y menos cuando
el círculo es cerrado como es el fútbol peruano. Pero para la arequipeña
Maribel Ugarte Quispe eso no fue inconveniente, su basta experiencia en
selecciones, su primera convocatoria fue en el 2007 a los 14 años, le sirvió
para ponerse la cinta al hombro y guiar a Perú en el Sudamericano de Fútbol
Femenino Sub-20 de Brasil.
“Creo
que la disciplina y el fútbol que tengo sirvieron para que me den la cinta de
capitana”, comenta a LÍBERO. “Es la primera vez que soy capitana y creo que es
la primera vez que una provinciana es capitana de una selección nacional”.
Ha
jugado en las selecciones Sub-17, Sub-20 y en la absoluta. Además tiene dos participaciones
en Copas Libertadores con White Star de Arequipa y J&C de Lima.
“En
el Sudamericano pensamos que podíamos hacer las cosas mejor, que estábamos a la
par de los otros equipos; pero cuando jugábamos era todo diferente. Además nos
perjudicó las lesiones y expulsiones”, cuenta.
Perú
terminó último en su sería, grupo “A”, solo empató con Bolivia y luego perdió
todos sus partidos.
Ahora
– cuenta – seguirá vistiendo la casaquilla peruana. “Ya me han dicho para jugar
los Juegos Bolivarianos”, confiesa. “Respecto a clubes, no sé dónde voy a
jugar”.
Comentarios