El 3-0 a Cienciano le da esa posibilidad inusual en el cuadro dominó de sentirse dueño de su futuro. Ahora, a una fecha de terminar este novel campeonato las cartas están sobre la mesa. Para llegar a esa final, sin depender de terceros, es ganar a San Martín en Lima. Otro resultado, hasta el empate, le dará opciones a Vallejo a conseguir el primer puesto del grupo "B".
Así están las cosas y así lo planificó a grandes rasgos Juan Reynoso. Tal como lo planteó a la administración temporal cuando inició este proyecto en diciembre del 2013, disputar la final del Torneo del Inca era el primer objetivo.
Claro que en el camino se han presentado algunos baches que bajonearon un mejor rendimiento estadístico. Aún ese 0-1 ante Universitario y el 1-1 frente a Los Caimanes, ambos en Arequipa, pesan pero no han sido lo suficientemente perjudiciales para quitar a este equipo la opción de pelear un título oficial después de 31 años.
El partido de ayer terminó con esa seguidilla de dos partidos sin poder ganar en Arequipa. Y no fue fácil aunque el marcador marque más diferencias de las que se vio en el campo de juego.
Ya Butrón lo había declarado a inicios de semana. "Todos ya saben como juega Melgar en Arequipa y la única forma de ser mejores es poner un plus", y así fue.
Para ganar la 90 versión del Clásico del Sur, Melgar puso ese plus que no suma en lo futbolístico sino en lo anímico, en la interna de cada jugador. Cienciano no hizo más de lo que sabe pero afrontó el partido como un "clásico". Corrió, metió, ensució y jugó fuerte, esas armas fueron suficientes para complicar el triunfo rojinegro que en el papel se veía fácil.
No es que, Butrón tuviera mucho trabajo, es más las únicas veces que se sintió presionado fue en cada saque de arco; sino que este Cienciano metió candado al único camino ofensivo que tiene Melgar: las bandas.
Sin Minzum ni Rivas como protagonistas con sus desbordes, las ideas se disipan en un equipo que necesita de un volante de creación que haga la diferente, que marque la pauta y desconcierte con sus movimientos.
Ni Soto ni Hohberg lo son. No tienen esa característica y esa es una tarea que Reynoso deberá solucionar para mejorar el rendimiento de su equipo pensando ya en el Apertura, porque con lo que tiene ahora parece sobrar para llegar a la final del Inca.
"Santi" estaba pasado de revoluciones desde que arrancó el partido. Cada fallo arbitral de Roberto Mauro lo criticó con insultados, hasta que llegó los 17´. Una pelota área provocó el choque de cabezas entre Beltrán y Rivero. Ambos caen al suelo y el capitán de Cienciano comienza a insultar al juez porque considera que el "che" había ido con el codo arriba y que ya era la segunda vez que entraba así. La primera amarilla, otro reclamo y de inmediato la roja.
Si a esas alturas Cienciano se presentó como un equipo duro en defensa y de mucha fricción en el mediocampo, en los minutos posteriores esas características se asentaron más. Los cusqueños sin armas para hacer daño futbolístico aplicaron la fuerza para descontrolar a los arequipeños y lo lograron.
Melgar nunca la tuvo clara. Por momentos hasta quiso repetir ese toque del extinguido juego del Barcelona, del pase lateral buscando el hueco, pero eso funciona cuando se tiene gente que desequilibra, que en la individual te saca dos jugadores de encima y rompe cualquier esquema ultradefensivo, pero este equipo no lo tiene. Así que costó mucho llegar a inquietar al portero Morales.
A los 31´nuevamente Soto crea peligro. Mete un frentazo que sale desviado; pero diez minutos más tarde este jugador que ofensivamente fue el que tuvo mejor presencia coloca el 1-0. Metió un disparo ingresaron al área grande para romper el cero.
Los cusqueños reclamaron. Discutían una posición adelantada de Cuesta que habría tapado la visión de su guardameta, pero el gol ya estaba cobrado.
DOS GOLES MÁS
En el complemento Cienciano no planteó nada diferente frente a un Melgar que siguió con el mismo esquema. Es más Reynoso metió a Valdez para ganar más peso ofensivo y sacó a Beltrán, pensando que así sería más ofensivo. Se equivocó.
Melgar poco a poco fue ganando terreno y se sintió más libre para meter pelotazos al área. Un tiro libre provocó que Valdez la toque y que Morales quede desairado en el área chica, en ese instante por inercia chocan y la pelota le queda servida a Balta que solo la toca para poner el 2-0 a los 62´.
Otro reclamo cusqueño. Pedían falta de Valdez sobre Morales. A esas alturas, los asistentes de Viera habían sido expulsados y bregaban contra la policía nacional en la reja del vestuario de norte. Ya Cienciano estaba descontrolado.
El "Polaco" Rivero buscaba a cualquier rival para desfogar su ira con insultos y codazos. No encontró mejor candidato que el argentino Cuesta que también es "fosforito". Ambos comenzaron a insultarse y a meterse manazos.
Con el 2-0, Cienciano estaba rendido pero Melgar volvió a cometer un error: agrandarse. Un par de tacos insulsos cuando lo mejor era el pase seguro a las bandas para limpiar la jugada provocó la ira de Reynoso que pese al triunfo quedó disconforme por lo que veía en la cancha.
Un pase de Cuesta a Alva a las espaldas de la defensa imperial provoca el tercer gol a los 89´de juego. El "Zorrito" que aunque futbolísticamente se mostró opaco, en despliegue físico fue de lo mejor. Corrió, metió, estorbó en el área rival como en la propia.
Pudo llegar el cuarto, pero Cuesta en vez de definir como sabe quiso hacer la diferente y la perdió.
El pitazo final de Mauro iniciaron los reclamos. Mientras los jugadores de Cienciano se le fueron encima, Rivero fue en búsqueda de Cuesta al túnel de ingreso al vestuario rojinegro. Estaba enloquecido con el argentino por una supuesta falta de respeto. Intervino Viera, Reynoso, todos los jugadores, para calmar al uruguayo. Pero la real cara de los cusqueños estaba en el centro del campo, Castrillón lloraba.
Los cerca de 8 mil espectadores que fueron a ver a Melgar quedaron satisfechas con el resultado y por ver un partido de esos que les gusta: de mucha fricción.
La final del Torneo del Inca está al alcance de las manos y no sería justo perder esa posibilidad. Solo falta subir un escalón, nada más.
ALINEACIONES
MELGAR: Butrón, Balta, Villamarín, Nelinho, Rivas, Minzun, Beltrán Vásquez, Soto, Cuesta y Alva. Cambios: Valdez TA x Beltrán, Hohberg x Soto.
CIENCIANO: Morales, Masías, Acasiete TR, Riojas TA, Hermoza, Robles, Nakaya, Rivero, Molina, Chira y Cardoza TA. Cambios: Castrillón x Molina, Virrueta x Masías, Capurro x Chira.
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| Parados: Cardoza, Morales, Riojas, Masías, Rivero y Acasiete. Abajo: Nakaya, Hermoza, Robles, Chira y Molina. |
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| Parados: Butrón, Balta, Vásquez, Beltrán, Villamarín, Minzum, Nelinho y Alva. Abajo: Cuesta, Rivas y Soto. |
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