Bazán, el bronce de su reinvindicación

Mario Bazán tras cruzar la meta. Foto EFE.

Ese grito lo tenía guardado en el alma. Ese bronce de ayer para él vale el oro puro, oro de 24 quilates, por todo lo que ha vivido estos últimos años. Mario Bazán Argandoña, a sus 31 años de edad, subió al podio cuando nadie, excepto él y su entrenador Alfredo Quispe, le tenía fe.
Los 3000 metros con obstáculos es una prueba de potencia, potencia y resistencia; pero además es estrategia y el limeño, que desde el 2004 vive en el Centro de Desarrollo de Arequipa, cumplió el plan al pie de la letra.
El primer objetivo era no despegarse del pelotón. Si lo lograba en los últimos 150 metros tenía que rematar en busca del podio, todo salió como se planificó.
Esos últimos 100 metros fueron cardiacos. Tuvo un mano a mano con el colombiano Sanmartín, que perdió literalmente por una cabeza.
El objetivo se cumplió: Medallas y marca.
Desde el 2011 no bajaba del 8.40. Este año corrió en junio 8.36 en el Meeting de Huelva (España) y ayer cruzó la meta en 8.32. Pero aún está lejos de los 8.28 del 2009 en el Mundial de Berlín que es su mejor marca que hasta ahora es récord nacional absoluto y que es el vigente récord sudamericano sub-23.
Llegó a esta final confiado en que por lo menos se mantendría entre el grupo que se metería en la lucha por la medalla y por ahí subir al podio con gran esfuerzo. Pese a que se tropezó dos veces con la ría (zona de fosa de agua), la carrera fue limpia hasta complotó la caída del competidor canadiense (Leanne Yee) cerca de la meta, para que logre el bronce.
Para Mario no es una medalla más, es su reivindicación para pedir más apoyo. Alguna vez dijo: "Sin medallas no hay apoyo", y ahora que lo ha logrado reclama  más ayuda. No basta que lo mantengan en el Car Arequipa, ni esos mil soles que recibe por el Programa de Apoyo al Deportista. Necesita más para sostener a su familia y conseguir más medallas para Perú.
Quizá todo eso pensó cuando cruzó la meta y lanzó un grito que le salió del alma.
La plata se le escapó de las manos, solo por milésimas. Cronometró 8.32.34, el colombiano Carlos Sanmartín, que fue plata, 8.32.24, y el oro quedó en manos del brasileño Santos Altobeli con 8.30.73.

Comentarios

Uds sob el único medio de comunicación que trató el tema de BAZÁN tal como fue. Desgraciadamente los medios de circulación nacional nunca informaron las cosas que PASÓ BAZÁN ESTOS ÚLTIMOS MESES. Pese a que fue abandonado por el IPD Y LA FAP MARIO BAZÁN SE DA EL LUJO DE RESTREGARLES EN LA CARA LA MEDALLA QUE HA OBTENIDO.